Una banda sonora que dura más que la película y un discípulo de John Zorn en esto de los scores. Totem del roquerío norteamericano más progre e intocable para sus fans, Patton está ya por encima de opiniones: a pesar de mantener simultáneamente varios proyectos de ditinto pelaje, basta con escuchar las primeras notas para reconocerlo. Eso es estilo.
martes, 11 de marzo de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario